No es que yo sea una superfeminista.
Y entiendo que en publicidad, la belleza vende, y si estamos hablando de bañadores y bikinis, pues mucho más.
Pero viendo este cartel publicitario:
¿No os parece que es un poco exagerado?
"¿Te gusta el bañador?"
"Pues... no sé. La verdad es que la anatomía de la jamona me llama más la atención que el bañador en sí. Vamos, que no me hago idea de cómo es el bañador, pero sí de su culo. Y de su escote. Y ¿es necesario que mire como si se te fuera a comer?"
En fins, fins...
Este fin de semana hemos estado de aniversario.
En una casita rural, en una zona sorprendentemente bonita.
Hemos visto muchas cosas chulas, lagunas, ríos mágicos, paisajes cuasi-lunares y bosques. Y cabras.
Ha llovido e incluso ha granizado, y después ha salido el sol.
Y hemos estado en uno como este, aprovechando todas sus posibilidades
Ha sido genial :)
Las que conocéis todo el culebrón ya sabéis un poco de mi historia con Él (a los que no, les recomiendo la lectura de "A coger caracoles" :))
El caso es que yo tenía Novio Titular y Él tenía a su novia, la Chica Buena. Ambas relaciones muy largas y con buenas personas, que esto no es como las comedias americanas (donde los novi@s oficiales son estúpidos y superficiales, y es facilísimo dejarlos)
Como los "dejadores" fuimos nosotros (yo al Titular, Él a Chica Buena), pues siempre te queda esa sensación de fondo... Culpa, remordimientos... un mal rollito que queda ahí.
Quizá también hay algo de vanidad ("pobre, le he dejado, qué va a hacer ahora, ¿estará bien?¿se recuperará algún día?") Como si fuéramos insustituibles - los humanos somos "asín".
Desde que empezó nuestra historia de forma ilegal, yo me había encontrado con Chica Buena UNA sola vez.
Eso fue en Julio de 2006.
Él lo dejó con ella el 17 de Enero de 2007. Aproximadamente :)
La siguiente vez que la vi a ella, Él y yo íbamos de la mano y tan tranquilos. Eso fue el 17 de Enero de 2008. Exactamente.
El Universo tiene un extraño sentido del humor. Estoy segura de que no volveré a verla nunca más. En fin...
El caso es que hace poco, Él tuvo que quedar con ella para no-sé-qué fleco suelto administrativo. Cuando volvió, me lo dijo.
Él: Hoy he conocido al nuevo novio de Chica Buena.
Yo: ¿!Sí!? (por alguna razón, me parecía sorprendente)
Él : Sip. Ella no me lo ha presentado como tal, pero está claro que es "el Nuevo" Yo creo que deben llevar unos cuantos meses.
Yo: Y...? ¿Y tú qué tal...?
Él: Ah, pues bien. Creo que salgo bien parado de la comparación (sonrisa) De todas formas, ella está tan a la defensiva las veces que nos hemos visto, que resulta facilísimo. Es otra persona, no tiene nada que ver con la que era cuando salía conmigo.
Yo: ¿Y como es Novio Nuevo?
Él: Pues más joven que ella, con pintas de buen chico, flojito, no muy guapo...
Yo: (Pues creo que a ella le pega bastante bien) Aaaah. Ya.
(La conversación dura un poco más y fin)
El caso es que desde eso, tengo la sensación de que Él se ha quitado un peso de encima. No uno grande, quizá no más grande que una piedrecita. Pero es algo que se desprende.
Quizá el hecho de ver que tu ex-pareja (a la que dejaste dramáticamente después de miles de dudas) ha rehecho su vida y está estupenda, genera ese efecto.
Ya no se siente mal por ella, y puede centrarse en lo que interesa de verdad (o sea, yo :P)
A lo mejor el saber que esa puerta está definitivamente cerrada, y que la otra persona está bien así, le ayuda. Creo que el pensar, sea cierto o no, que quedan puertas abiertas con relaciones anteriores no ayuda nada a la "paz de espíritu".
Quizá son solo pajaritos míos.
Yo aún no he visto al Ex-Titular con nadie (no le he visto, en general), ni sé si ha tenido/tiene otra novia. Si lo veo, prometo un post "La nueva Novia del Ex-Titular" con las repercusiones del encuentro :)
